3 de julio de 2024. La inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment) está revolucionando la manera en que el capital puede abordar desafíos locales específicos, promover el desarrollo sostenible y fortalecer las comunidades. Esta estrategia, que combina recursos públicos y privados, busca generar retornos financieros junto con beneficios sociales y ambientales. En este artículo, exploramos la estrategia del Instituto de Inversión de Impacto, los estudios de caso en Inglaterra y las perspectivas de VIVA Idea sobre esta innovadora forma de inversión.
Reino Unido es un país desarrollado pero que tiene desigualdades regionales importantes y son cada vez más evidentes, en ese contexto, la inversión de impacto basada en terreno inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment) es vista como una estrategia prometedora para enfrentar esos desafíos.
El Instituto de Inversión de Impacto de Inglaterra ha estado a la vanguardia de promover y expandir la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment), trabajando con diversos actores para fomentar inversiones que no solo generen retornos financieros, sino que también aborden problemas sociales y ambientales.
Este enfoque, la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment), reúne capital público y privado, capacidad y habilidades para impulsar inversiones que respondan a las oportunidades y retos únicos de cada localidad.
La creciente aceptación de la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment) y su implementación en diferentes regiones del Reino Unido muestran cómo esta forma de inversión puede promover un desarrollo inclusivo y sostenible.
En el caso de Reino Unido, el Instituto ha mostrado que la clave es el terreno, el “lugar”, la apropiación de la inversión a las necesidades de ese espacio. Y busca que esos “lugares”, tengan su voz.
En el caso del sur global, la contextualización sería totalmente distinta, como es evidente por las distintas condiciones de cada localidad.
En el reciente el informe “Place-based Impact Investing: Emerging Impact and Insights” publicado por el Instituto de inversión de impacto, define la inversión basada en terreno (place-based impact investment) como una estrategia que combina recursos públicos y privados para responder a los desafíos y oportunidades específicas de una localidad.
Dos ejemplos notables de la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment) en acción son los proyectos en Wakefield y Southampton. En Wakefield, un antiguo área minera, el proyecto la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment) ha involucrado a inversores en iniciativas de regeneración urbana, energía limpia y crecimiento de pequeñas y medianas empresas (PYMES).
Este proyecto ha llevado a la exploración de asociaciones con grandes empresas de construcción para desarrollar habilidades verdes y atraer capital hacia pequeñas empresas a través de una Institución Financiera de Desarrollo Comunitario (CDFI) con sede en West Yorkshire.
Por otro lado, Southampton está explorando cómo el enfoque de la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment) puede desbloquear inversiones para capitalizar iniciativas clave de regeneración y mejorar sus sectores creativos y culturales.
Este esfuerzo está basado en su candidatura a la Ciudad de la Cultura del Reino Unido en 2025, buscando mantener el impulso y atraer inversiones a largo plazo que promuevan el crecimiento y la prosperidad en la ciudad y la región.
Estrategias para escalar y difundir
El Instituto de Inversión de Impacto ha delineado una estrategia para escalar y difundir la inversión de impacto basada en terreno en los próximos años, centrada en siete áreas clave.
Una de las principales es el engagement de inversores, organizando eventos y reuniones para fomentar la comprensión y el compromiso con la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment), como el Foro de Inversión y Infraestructura Inmobiliaria del Reino Unido (UKREiiF) y otras conferencias líderes. Además, se continuarán los proyectos piloto, como el de Southampton, desarrollando proyectos de regeneración cultural y explorando nuevas oportunidades de inversión.
El Instituto plantea la creación de una “coalición de lugares”, esto es un conjunto de instancias, iniciativas o espacios en los que quienes sean beneficiarios de la inversión de impacto puedan coordinar entre sí y en conjunto con inversionistas y que potencie, por lo tanto, el alcance de esos “lugares”. Esta coalición jugará un papel crucial al proporcionar un foro para que las partes interesadas compartan conocimientos y faciliten conexiones. Asimismo, se busca involucrar y apoyar a más autoridades locales para adoptar el enfoque la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment), basándose en los conocimientos obtenidos. También se promoverán prácticas de engagement comunitario mediante el desarrollo de una comunidad de práctica para mejorar las mejores prácticas.
Otra área clave es la innovación en finanzas combinadas, donde se crearán laboratorios de innovación para explorar soluciones a desafíos específicos en diversos sectores. Finalmente, el Instituto organizará una conferencia anual de la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment) para compartir aprendizajes, profundizar en las prácticas y atraer a nuevos inversores y lugares interesados en esta forma de inversión.
Perspectiva de países en desarrollo
Desde la perspectiva de VIVA Idea, la la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment) es crucial para lograr un impacto significativo y sostenible en las comunidades locales. Shannon Music, directora de Operaciones y Alianzas Estratégicas de VIVA Idea, enfatizó la importancia de este enfoque: “La inversión de impacto basada en terreno es clave para alcanzar un impacto significativo, ya que permite contextualizar las soluciones según las necesidades y potencialidades de cada lugar, asegurando así su efectividad y sostenibilidad a largo plazo”.
Además, Urs Jäger, director de Investigación de VIVA Idea, subrayó la necesidad de adaptar las experiencias y enfoques de la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment) a cada localidad específica: “Para que la inversión de impacto basada en terreno sea verdaderamente efectiva, es esencial apropiar las experiencias y enfoques a cada lugar, contextualizando las estrategias y construyendo sobre las fortalezas y desafíos propios de cada comunidad.”
La inversión de impacto basada en terreno representa una oportunidad única para abordar los desafíos locales y promover un desarrollo sostenible e inclusivo. A través de la colaboración entre el sector público y privado, y mediante estrategias bien delineadas como las propuestas por el Instituto de Inversión de Impacto, es posible transformar comunidades y generar beneficios tanto sociales como financieros.
Las experiencias en Wakefield y Southampton demuestran el potencial de la inversión de impacto basada en terreno (place-based impact investment) para revitalizar economías locales, y con el apoyo continuo y la implementación de las mejores prácticas, este enfoque puede escalar y difundirse ampliamente, llevando prosperidad y bienestar a más regiones.
La perspectiva de VIVA Idea refuerza la necesidad de contextualizar y adaptar las estrategias de inversión, asegurando que cada localidad pueda maximizar su potencial y alcanzar un impacto duradero y significativo.
Recientemente, VIVA Idea organizó un taller, en el marco de la reunión anual del grupo internacional GSG Impact, realizada en Costa Rica, sobre las nociones de las más de 40 organizaciones integrantes del grupo internacional. Algunas de esas reflexiones están reseñadas en este artículo de VIVA Idea.
En ese taller las personas participantes discutieron sobre los puntos clave para una estrategia efectiva de inversión de impacto basada en terreno en países en desarrollo. Estos puntos resaltan la importancia del compromiso de las partes interesadas y la comunidad, el uso de métodos rigurosos para medir el impacto, y la implementación de marcos y métricas estandarizadas. Además, enfatizan la necesidad de fomentar la colaboración y la transparencia, establecer redes efectivas, y reconocer los desafíos únicos de cada localidad, proponiendo soluciones prácticas que permitan superar obstáculos y potenciar el impacto positivo de las inversiones.
Los facilitadores del taller, Urs Jäger y Jose Valverde, integrantes de VIVA Idea, también subrayaron la importancia de un enfoque holístico y adaptativo, asegurando que las estrategias sean inclusivas y sostenibles a largo plazo. La participación activa de la comunidad y la creación de capacidades locales son esenciales para el éxito de estos proyectos, según se desprendió de los aportes de los líderes mundiales de inversión de impacto.
También se destacó que es crucial alinear los roles de las partes interesadas y compartir mejores prácticas para crear un ecosistema robusto de inversión de impacto. Estas acciones fortalecen la confianza y el compromiso, permitiendo un desarrollo más efectivo y duradero en las comunidades locales.
La inversión de impacto, según ha dicho uno de sus principales promotores, el británico inversionista y filántropo Ronald Cohen, es una alternativa concreta ante las dificultades de medición de los estándares de cumplimiento ambiental, social y de gobernanza (ESG, según sus siglas en inglés o ASG en español), ya que “ESG promete tanto impacto como retorno, pero no mide el impacto con precisión. Ahora más que nunca se muestra la necesidad de la medición”, afirmó Cohen.